En la Clínica Omega Zeta Andorra disponemos de la tecnología más avanzada para hacer un estudio biomecánico del esquí, lo que permite al esquiador conocer la zona exacta de la pisada y la fuerza que imprime.
El estudio biomecánico del esquí recrea la práctica de este deporte en un simulador que recoge datos técnicos y permite medir las presiones plantares que realizan los pies en el desplazamiento lateral del movimiento técnico del esquí.
El objetivo del estudio biomecánico del esquí es cuantificar qué carga soporta cada zona de los pies y conseguir restablecer y perfeccionar un funcionamiento correcto del gesto.
Además, el simulador de esquí permite valorar los grados de flexión de las rodillas y caderas en cada una de las fases del desplazamiento lateral, de manera que permite detectar asimetrías articulares.
El estudio biomecánico del esquí favorece una reeducación postural del cuerpo, mejorar el movimiento de las extremidades y disminuir los impactos en las diferentes situaciones del esquí.